Santuario Del Niño Dios De Reyes

Santuario Del Niño Dios De Reyes
El Santuario está ubicado al Nor Oeste de la zona urbana del distrito de Salas en la margen derecha del riachuelo en un área de 7,829.58 m2 y un perímetro de 399.49 ml. Como antecedente a este Santuario, este espacio era un cerrito llamado “Cerro Horcón” o “El Niño” El cual era usado para que los curanderos realicen sus mesadas, pero en aquellos tiempos la práctica de la brujería estaba prohibida, por ello el Párroco Francisco Ávila colocó una cruz, y con el tiempo se levantó una capilla, donde empezaría a escribirse la historia y la devoción al Niño Dios de Reyes, que ahora tiene 155 años. En el año 1,863 llega a Salas una imagen llamada “NIÑO JESÚS” procedente de la Provincia de Navarra - España del ayuntamiento de Pamplona, del taller de la familia Sánchez – Ardaiz, traída por el Párroco español Alvaro de La Mantilla, el cual es entregado al pueblo y al párroco Pablo Mendoza también español quien estaba a cargo de las parroquias de Salas, Penachí y Cañarís, y es en 1,888 que se le da el nombre de “Bienaventurado Niño de los Reyes y Protector del Señorío de los Salas” y nombran como primer patrón de fiesta (Mayordomo) al Sr. Pedro Chuquipoma Huamán hombre con mucha plata y es con este patrón de fiesta que se construye la Primera Capilla con techo de paja y adobes fue patrón de fiesta hasta el año 1,896. Fue en 1,921 el Sr. Fortunato Bernabé Lara, mayordomo de la fiesta, cambia totalmente el nombre y ahora se llama “NIÑO DIOS DE REYES” y allí empieza a llegar los diablicos, músicos con arpa y allí ya mencionan a los Reyes Magos. Es por ello, que integrantes de grupos religiosos se pusieron de acuerdo con la Municipalidad de Salas, y a través de diversas actividades se realizó la primera etapa. El Santuario del Niño Dios de Reyes, ubicado en el Cerro Horcón, cuenta con escalinatas de cemento y en la cima se encuentra un Museo Sacro Religioso Niño Dios de Reyes. Un museo de arte sacro, el único en la región Lambayeque y el sétimo en todo el país una Pinacoteca. La Pinacoteca, no solo se caracteriza por la historia que narra, sino por el arte que lo acompaña en la descripción de su devoción, tiene ocho (08) óleos que narran la vida del Niño Dios. Hay un primer óleo, que es la estrella de Belén, luego viene el nacimiento, el óleo de la escuela de Quito data de 1893, la Masacre de los inocentes, es una réplica de Nicolás Poussin, exponente de la pintura clásica y francesa del siglo XVII, La Epifanía, una réplica del pintor renacentista El Greco, La Inmaculada Concepción, que es donación de un devoto y otra pintura que viene de la academia Miguel Angel de Italia, que fue donado por una devota, una pintura muy especial porque es arte brocado en alto relieve, la Huida a Egipto, el regreso de Egipto, donde el niño Jesús vuelve a los 9 años y el Niño Dios de Reyes. La cúpula es de estilo bizantino, pesa 2 toneladas y media, y cuenta con tres anillos de cubos de vidrio esmeralizados en pan de oro, dos mil trecientos catorce (2,314) cubos pequeños. Asimismo este espacio de arte religioso presenta frisos en el techo donde se observa al Arcángel anunciándole a María que va a tener un niño. Todos los óleos que permanecen en el museo están enmarcados en pan de oro y han sido realizados en la Escuela de Bellas Artes en Lima. También hay un ambiente, donde se ubican las pertenencias del Niño Dios de Reyes. La cúpula de esta parte, lleva ángeles pintados, que fueron pintados por el reconocido artista tumaneño Manuel Vásquez Niño. En este ambiente se encuentra la historia del Niño Dios, la fotografía del párroco que lo trajo, las sillas que ha utilizado el niño en todo este tiempo y una colección de su vestimenta. La vestimenta más antigua está hecha de tela damasco, una tela muy cara que solo los papas la utilizan cuando canonizan a un santo. Existen vestimentas de 1927 y 1936.