Danza Los Negritos De Chicla

Danza Los Negritos De Chicla
Los Negritos de Chicla, representada a la fiesta patronal en honor a “San Juan Bautista de Chicla”, que tiene lugar desde el 22 al 29 de junio. El “negrito” personaje de la danza, es una remembranza de los antiguos esclavos de raza negra que, durante la colonia, se afincaron en esta parte del valle de los Andes Centrales, donde los pueblos andinos descubrían a los esclavos en sus momentos libres, su propia forma de bailar y cantar, quienes comenzaron a imitarlos en su vestimenta y se colocaban una máscara representativa al negrito. Así también en la vida republicana la danza y música habría sido adaptado cuando los comerciantes Chiclinos se desplazaban en acémilas a Huanza para intercambiar productos de pan llevar y costumbres a mediados del siglo XIX. La danza es dirigida por el caporal, personaje que representa autoridad y lleva consigo un chicotillo. Existen seis cuadrillas de negritos que representan por día cada hermandad “Corpus Christi”, “San Antonio de Padua”, “Virgen de Carmen”, “San Martín de Porras”, “San Pedro y San Pablo” cada uno congrega para los siete días de celebración, a los mayordomos, reconocidas bandas, caporales, cuadrillas y donaciones que son llevados en baile con la danza de los negritos, la cual recae en niños, jóvenes y adultos. La vestimenta posee características propias, las cuales se componen de cotoncillo prenda bordada de figuras de flores en alto relieve con hilos de oro o plata, máscara negra de cuero de carnero, pañuelos para amarrar la máscara en la cabeza del negrito y otro pañuelo blanco para el baile, pantalón color negro, camisa blanca manga larga, par de zapatos negros, corbata de color según a la cuadrilla que pertenece, sombrero blanco de paja estilo jaujino, adornado de plumajes multicolores sujetado de una cinta negra, chicotillo que es el látigo con adornos de plata labrada o de acero, amarrada hacia el mango con vueltas, además de guantes de lana negra y campanillas de bronce completan el atuendo. Durante los días de celebración, la coreografía de la danza consta de tres fases, en la primera parte se denomina “Pasacalle” está compuesto por cuadrillas de negritos formados en tres filas, marcando el paso de un lado a otro dando vueltas y haciendo sonar sus campanillas quienes, al ritmo del acompañamiento de la banda típica conformado por bombos, trompetas, platillos y saxofón se desplazan recorriendo las calles del pueblo para visitar los hogares de los devotos y recoger las ofrendas como cirios, capas, arreglos florales y otros enseres. La segunda fase es “La Adoración a San Juan Bautista” que al llegar a la iglesia San Juan de Chicla para la misa de víspera, los danzantes se posicionan en el centro y bailan alrededor de ella al compás de la melodía de adoración, se sacan el sombrero con la mano izquierda lo levantan, dan vueltas en círculo y con el pañuelo en la mano derecha realizan el saludo al santo patrón. Finalmente, “La despedida”, el 24 de junio, que es el día central de la fiesta, se lleva a cabo la solemne misa, procesión del santo patrón San Juan Bautista y degustación de platos típicos, quienes en horas de la tarde, los negritos acuden a la iglesia para recoger las ofrendas donadas y en las intermediaciones de la misma se produce el tradicional cruce de cuadrillas de negritos y bandas típicas, con la cuadrilla de la hermandad que corresponde ese día realizar su misa de víspera, acto seguido el caporal ordena a la banda, cambiar la melodía de estribillo al “Pachahualay”, llevando consigo el pañuelo; la hace flamear, baila y guapea, haciendo saber su tristeza por la despedida de la festividad hasta el próximo año. Esta danza es la más tradicional del distrito de Chicla, es por ello que los turistas llegan hasta la localidad para desarrollar actividades turísticas y ser testigos de esta costumbre, que cautiva por su sentimiento de melancolía, elegantes trajes, clásicos pasos y estribillos de la danza los negritos de Chicla.